Opinión pública
Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- En 2022 los tamaulipecos residentes en el extranjero podrán votar, vía electrónica, por el candidato a Gobernador de sus preferencias.
Decirlo es muy sencillo. En el fondo hay una serie de implicaciones que llevarían a reformas y adiciones a la Ley Electoral, si se quiere trabajar “como Dios manda”.
Para comenzar ¿podrán los candidatos hacer campaña fuera de México? Ahora mismo está prohibido. Solo pueden moverse en territorio nacional y es así que ciertos candidatos jarochos vienen en plan de proselitismo a Reynosa, y los tamaulipecos van a Monterrey.
Una segunda pregunta ¿se permitirá a esos paisanos que colaboren económicamente en el proselitismo?. La Ley en vigor dice que no pueden abrir su cartera aquellos que “vivan o trabajen en el extranjero”.
Está claro que los forasteros no pueden meterle dinero, pero ¿nuestros paisanos? Ellos son mexicanos y tienen sus derechos políticos a salvo. Tramitaron su credencial de elector.
El otro punto importante es la elaboración del padrón. Es necesario darles más facilidades y tiempo (tres meses antes de los comicios se cierra la inscripción) para integrar la lista de votantes.
No es necesario decir que la mayor parte los connacionales que están fuera de la Patria viven en Estados Unidos, y es a donde nuestros políticos podrían ir a realizar campaña y, de paso –como es la costumbre-, repartir “frijol con gorgojo”.
Es la primera vez que votarán nuestros coterráneos para Gobernador. Ya tienen la experiencia de sufragar para Presidente de la República y senadores.
Como quien dice, “si nos va bien” en esta primera vez, a la siguiente el sufragio podría extenderse para diputados locales y, por que no decirlo, por alcaldes. Estamos platicando.
Sobre el voto para Presidente, queremos incluir un dato que resulta interesante.
Para comenzar, en las dos últimas elecciones se hizo a través boletas enviadas vía correo en sobre lacrado, que llegaron con semanas de anticipación a los órganos correspondientes para hacer el recuento.
En 2006 votaron 41 mil ciudadanos desde el exterior. De ellos el 58 por ciento lo hizo por Felipe Calderón, quien se alzó por la Victoria.
Ya con más experiencia (conocer el camino), en 2018 se empadronaron 182 mil (152 mil en los Estados Unidos) y, al final, concurrieron a la urna (en figurativo) casi los 99 mil.
Para no perder el interés de la cercanía ¿cuántos de Tamaulipas?. El dato dice que se enlistaron un promedio de cinco cuerudos y dos mil y pico emitieron sufragio para Presidente y dos mil 102 para Senador.
Otra vez lo interesante. Del total de mexicanos, el 65 por ciento se inclinaron por Andrés Manuel López Obrador, el ganador, y el 26.7 por Ricardo Anaya, uno de los “difuntitos”.
Vamos a decir que más o menos el mismo porcentaje de nuestros tamaholipecos lo favorecieron, por lo que se derivan otras preguntas ¿ya los “perdió”? ¿siguen apoyándolo? ¿votaron por él o por Morena?.
Organizar el voto en el extranjero no será fácil para los jefes del INE-IETAM. No sabemos cuantos, pero si que hace dos años concurrieron paisanos de 109 países, el 76 por ciento del lado “gringo”.
La información es para irle tanteado el agua a los camotes. Una vez que se permita el voto para Gobernador, el padrón subirá a miles. No se necesita ser un genio para intuirlo.
Según el dato del Instituto Nacional, en el 18´ alrededor de 17,300 mil tamaulipecos tramitaron su credencial desde otras tierras (por paquetería o los consulados), pero al final decíamos, poco más de cinco mil 200 las activaron.
Igual que aquí, muy alto el abstencionismo en tierra lejanas.
Reiterando, el otro dato que no hay que perder de vista es que tales sufragios –que se emitieron semanas antes de las elecciones- marcaron la tendencia de quien ganaría posteriormente.
Antes de cerrar el tema. Si las autoridades electorales calculan que alrededor de 20 mil paisas andan fuera del país, y si de ellos más de 17 mil respondieron a la campaña de empadronamiento (desde el exterior) hace dos años, lo más probable es que crezca el interés cuando se trate de nombrar Gobernador.
Solo estamos hablando, decíamos, pero es un tema que en su momento no deben olvidar ni los partidos ni sus candidatos. Los votos que lleguen del lado “gringo” podrían definir una elección.
Y dale con el virus que nos trae de cabeza. La autoridad prolongó el “descanso obligatorio” hasta el 30 de mayo, que es sabadito, para reanudar actividades el uno de junio. Demasiado optimismo frente a un mal que no tiene palabra.
Por lo pronto quedan casi mes y medio más de inactividad, mientras en Tamaulipas los casos positivos comienzan a subir: Al momento de escribir estas líneas sumaban 111, 28 investigación, recuperados 13 y cinco muertos. La estadística puede cambiar en cuestión de horas.
En las siguientes tres semanas estallará el problema. Ante ello la autoridad sanitaria local se prepara. Casi imposible que las clases se reanuden el 17 de mayo, como dice el Presidente López, en aquellos municipios donde la transmisión es nula o baja. No se trata de territorios aislados sino de actividad entremezclada con las ciudades.
Veamos: Difícil de autorizar el regreso a clases en los municipios del Altiplano y sigan cerradas las escuelas de Victoria, por ejemplo