Equipos de la liga premier reabrieron sus centros de entrenamiento en grupos reducidos para preparar la reanudación de la actividad

Arsenal, Brighton y West Ham reabrieron este lunes sus centros de entrenamiento para sus futbolistas, pero de manera controlada, con el fin de ir preparando la reanudación del campeonato inglés de fútbol, posiblemente a comienzos de junio.

En un comunicado, el Brighton anunció que autorizaba «un acceso restrictivo a las canchas exteriores a los jugadores del primer equipo, para entrenamientos individuales facultativos».

«Los jugadores deben realizar una reserva y se les asignará unos horarios de llegada escalonados, así que una parte de terreno para entrenarse», manteniendo las consignas gubernamentales de distanciamiento social como medida de lucha contra la pandemia del nuevo coronavirus, precisó el club del sur de Inglaterra.

Un portavoz del West Ham indicó, por su parte, que los jugadores que viven en apartamentos y que no dispongan de grandes espacios para realizar ejercicios físicos han sido autorizados a entrenarse en las instalaciones del club.

«El acceso estará limitado a un jugador cada vez y todas las sesiones serán efectuadas en conformidad con las directivas gubernamentales», precisó.

Finalmente, el Arsenal confirmó que sus futbolistas están autorizados a ir al centro de entrenamiento de los Gunners, aunque bajo una estricta vigilancia.

Otros clubes como Bournemouth, Burnley, Crystal Palace o Sheffield United también están preparando a sus jugadores a una inminente y progresiva reanudación de los entrenamientos.

Según varios medios, la Premier League estudia una vuelta a la competición el 8 de junio, sin público y con un número limitado de estadios para reducir los riesgos de propagación del coronavirus.

La fecha «oficial» se fijará el 18 de mayo, lo que dejará a los clubes tres semanas para preparar a sus jugadores para los 92 partidos que restan.

El gobierno británico autorizaría una reanudación de los torneos de fútbol, rugby, cricket y otros deportes con el fin de elevar la moral de los británicos, según la edición del diario The Times de este lunes.