Por Juan Sánchez-Mendoza
A través de las redes sociales, la Secretaría de Salud (federal) difundió que son ahora cinco casos confirmados de coronavirus en todo el país. Y existe la sospecha de que hay otros 11 contagiados.
Hasta la madrugada del domingo, únicamente fueron aceptados cuatro infectados: dos en la Ciudad de México, uno de Torreón (Coahuila) y otro en Sinaloa.
Pero en la víspera, se confirmó que en Chiapas hay un enfermo más.
Y hay la sospecha que existen infectados en Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Oaxaca y Quintana Roo.
A nivel mundial se han reportado 87 mil 137 casos confirmados y 2 mil 977 perdonas han muerto en consecuencia.
Sin embargo, aunque las autoridades de la Secretaría de Salud digan que ‘no hay razón’ para alarmarse ante la aparición del coronavirus en todo el país se advierte temor, porque la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda prepararse para una potencial pandemia (propagación planetaria de una nueva enfermedad).
El pronunciamiento lo hizo el director del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, días antes de que en México se reconociera, oficialmente, la presencia de infectados –2 en la CdMx, uno en Sinaloa, otro en Coahuila y el más reciente, en Chiapas–, y en la Unión Americana ocurriera la primera muerte –aunque, allende el Río Bravo, aceptan tener casos en California, Oregón y Washington–, derivada del Covid-19.
Aquí en México, reitero, la Secretaría de Salud aduce que los casos son ‘importados’.
Es decir, que se trata de pacientes que contrajeron el mal ‘más allá de nuestras fronteras’.
En cuanto a las estadounidenses, ninguna de ellas ha salido del país y sin embargo presentan cuadros de alto riesgo.
Al menos, una mujer mayor (con enfermedades crónicas), del norte de California; una estudiante de secundaria en Everett (Washington), y, la otra es empleada de una escuela de Portland (Oregón), pero ¡tampoco! tuvieron contacto con gente que recientemente haya visitado China ni su alrededor.
Como sea, las mantienen aisladas y también a sus familiares.
Aquí en el terruño, uno de los infectados (Sinaloa) acaricia los 35 años de edad y recientemente viajó a Italia, por lo que se encuentra aislado en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias.
Y sobre el tema ha dicho el subsecretario de Salud Hugo López Gatell: “El infectado viajó a Bérgamo (Italia) el 16 de febrero pasado, regresando a México el día 21, presentando escurrimiento nasal, tos y fiebre”.
En la primera prueba dio positivo; y en la segunda, a cargo del Instituto Nacional de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica, se confirmó el contagio.
Hay, en la Ciudad de México, otros dos casos, según acepta la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, pero omite dar pormenores para que, según ella, proteger sus identidades y a sus familias.
Uno más en Coahuila, reconocido por el mandatario Miguel Ángel Riquelme Solís.
Esto ante la auscultación realizada a una joven de 20 años que recientemente llegó de Italia y en Torreón presentó síntomas.
Primero en su consulta en un consultorio privado, luego en un hospital público.
En Chiapas, la joven que presenta el problema infeccioso también estuvo en Italia. Concretamente en Milán, donde estudiaba.
Lo cierto es que las autoridades del Sector Salud tanto federales como estatales ocultan información para, según ellas, evitar aterrorizar al pueblo.
Sin embargo en las redes sociales se advierte una clara tendencia a la psicosis, que, es, precisamente, lo que querrían evitar los funcionarios del Sistema de Salud.
Pero su tarea (harto importante en el caso de los especialistas en esta materia), no la bajan a los ciudadanos y por eso hay psicosis.
Más cuando en las farmacias se han agotado los cubrebocas como los geles antibacterianos.
