Por Ramón Mendoza S.

 

La Unión de Obreros y Trabajadores de la rama de la construcción de Tamaulipas, adheridos a la CROC, ha comenzado a presentar ante el sector productivo y laboral el nuevo tabulador de salarios que se ejercerá durante el presente año, con un ajuste a la alza de un 4 por ciento, informó su dirigente Lorenzo Balderas Castillo.

A partir del primero de primero de enero del año en curso, comenzó a regir un nuevo tabulador de salarios para los trabajadores de la construcción que realicen obras en el sector público y privado, con una variación del 4.0 por ciento de aumento.

Con esto, más del 80 por ciento de los obreros de la rama de la construcción sacrifican su sueldo, para lograr ser ocupados en la raquítica mano de obra que se genera en esta región centro del estado.

Dijo Balderas Castillo: “En promedio son unos 6 mil obreros quienes prefieren tener trabajo que recibir un salario acorde al tabulador salarial que establecen los contratos de obra.

“Más del 80 por ciento de nuestros compañeros en esta zona centro del estado sacrifican sus sueldos de acuerdo al tabulador, con el fin de tener garantizado un ingreso, prefieren ganar poco, pero seguro”.

El nuevo tabulador establecido en la rama de la construcción que alberga a carpinteros, albañiles, ayudantes y jornaleros es el siguiente:

Un maestro de obra (albañil), mil 900 pesos a la semana; ayudante, mil 350 pesos; jornalero, 950 pesos; y así sucesivamente.

Eso es en cuanto a los trabajadores de la rama de la construcción que lo integran también los carpinteros y yeseros, entre otros.

El dirigente explicó que “el propósito de este aumento obedece a mejorar las condiciones de vida de los trabajadores de la construcción, de manera tal que el salario pueda competir con la inflación que se vive en el país y específicamente en el estado de Tamaulipas, donde las condiciones son adversas por la falta de empleos”.

Igualmente, dijo, se han venido haciendo alianzas con algunas empresas del sector privado, constructoras que sí los toman en cuenta, para mejorar el salario de los trabajadores, quienes se están ajustando actualmente al nuevo tabulador.

“No podemos permitir que los trabajadores estén produciendo riqueza y a cambio, reciben un salario totalmente devaluado, que no compite con la realidad y no alcanza ni el 50 por ciento del costo de la canasta alimentaria”, sentenció.