Por José Inés Figueroa Vitela

 

Los más afectados con el ‘distanciamiento social’ que impone la pandemia del coronavirus, son los políticos que ya tenían una ruta trazada, camino de coronar sus aspiraciones de corte electoral y hoy no saben qué hacer para retomar su proyecto.

Hay quienes celebran el recogimiento de sus pretendidos adversarios, porque, sacudidos de escrúpulos –si es que alguna vez los tuvieron– y envueltos en la ignorancia o el valemadrismo, se lanzan a la calle a buscar adeptos sin el menor recato.

Es el caso del representante del Gobierno federal en el estado, José Ramón Gómez Leal, quien desoyendo las recomendaciones de las autoridades todas, incluidas las de Salud central, no sólo sigue, sino que ha multiplicado los eventos masivos para el reparto de apoyos sociales.

Al ‘JR’ ya se le han hecho varios extrañamientos, públicos y privados, para que acate las primicias en contra de la proliferación del coronavirus, pero pensando, tal vez, que los daños colaterales –contagio y muerte entre los sectores de alta vulnerabilidad que anda exponiendo–, bien valen la pena para que ahora sí, andando solo entre los aspirantes, pueda hacer roncha y lo tomen en cuenta a la hora de las nominaciones de futuro.

Al líder del Congreso local, Gerardo Peña Flores, parece que también ya lo agobió el aislamiento social, sea por condición propia, o por inquietud de cualquiera de sus coordinados en la bancada panista y hasta en las otras representaciones político-partidistas.

El hecho es que, aludiendo las previsiones contra la peligrosa pandemia, hace dos semanas cerró el Palacio Legislativo al acceso de extraños –incluidos los periodistas– y la pasada, de plano canceló las actividades legislativas, pero para ésta –cuando en voz de las autoridades sanitarias entramos a la etapa crítica–, ya empezó a revertir las previsiones.

Por lo pronto tienen convocado para mañana la celebración de una serie de reuniones de trabajo en comisiones para desahogar distintas iniciativas y en su caso, emitir los dictámenes correspondientes.

La Comisión de Justicia verá la propuesta de nombramiento para el cargo de Consejera del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial del Estado, sobre la propuesta de la jueza de Primera Instancia de lo Civil del Décimo Tercer Distrito Judicial, con residencia en Río Bravo, Ana Verónica Reyes Díaz.

No confundir con la otra jueza, sobre la que también debe resolver el Congreso, en su caso por el turno que le dio la Fiscalía Anticorrupción del Estado, pidiendo la procedencia para poder procesarla ‘por haber falsificado una receta’ para justificar falta al trabajo.

Al respecto ya procedió el amparo de la justicia federal y nunca se llamó a la Comisión Instructora para conocer el expediente, al que se dio entrada a principios de diciembre del año pasado, por correspondencia.

Con todo y aquello, el Congreso debe emitir una resolución sobre el tema que le turnaron, en su caso, sobreseyéndolo.

De la jueza, en vísperas de integrarse a una silla dentro del Consejo de la Judicatura Estatal, igual los buscadores de internet ubican un caso en el que el ex alcalde ríobravense, Rogelio Villaseñor, la acusó de actuar parcialmente, a favor de su ex esposa, para perjudicarlo violentando el orden jurídico.

Se dice que en el desenlace de todo proceso judicial siempre va a haber alguien que aclamará el imperio de la justicia y otro reclamando lo contrario; será las partes, en función de lo que dicte la sentencia.

Pero volviendo al trabajo legislativo reanudado, mañana también la Comisión de Trabajo y Seguridad Social dictaminará una propuesta de Punto de Acuerdo por el que se exhorta a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del Gobierno de México, para que, dentro del ámbito de su competencia, intervenga de manera urgente, a fin de vigilar y revisar la salvaguarda de los derechos laborales y sindicales de los trabajadores en el estado de Tamaulipas.

Y la Comisión de Salud, otro Punto de Acuerdo mediante el cual ‘el Congreso del Estado Libre y Soberano de Tamaulipas, formula un respetuoso exhorto a la Secretaría de Salud del Gobierno federal para que diseñe las políticas públicas necesarias para el abastecimiento de medicamentos en el estado para el cuidado y atención de la Salud de las y los tamaulipecos, específicamente al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

La Comisión de Estudios Legislativos, por su parte, desahogará la iniciativa de Decreto mediante el cual se reforman diversas disposiciones del Código Municipal y la Ley Orgánica del Tribunal de Justicia Administrativa ambos del Estado de Tamaulipas.

Por estos tiempos, la agenda pública estatal está más bien concentrada en torno de la pandemia del coronavirus.

La secretaria de Salud del estado, Gloria Molina Gamboa, ayer volvió a dar conferencia de prensa. En esta ocasión llevada hasta uno de los apartados del Polyforum Victoria, con espacios más amplios para concretar la ‘sana distancia’ entre los compañeros periodistas.

La novedad consistió en la confirmación de un nuevo contagio dentro del municipio de Nuevo Laredo, para sumar ocho en la entidad, al tiempo que se declararon siete nuevos casos sospechosos, en estudio, con una serie de particularidades.

De los ocho contagiados, dos ya cumplieron la cuarentena; el primero de Altamira, los nuevos análisis dicen que ya no tiene el virus y la segunda, de Reynosa, ayer tarde se esperaba el resultado pero la expectativa era similar, para darles una pre alta, dejando correr otros 15 días para otro examen que confirme su sanidad.

De los siete sospechosos, una de las cinco registradas en Reynosa –los otros dos son de Victoria y el Mante–, era México-americana (tenía la doble nacionalidad, aunque radicaba más en los Estados Unidos), venía de Houston y Arlington, Texas, llegó sintiéndose mal, se internó en Río Bravo y la trasladaron en Reynosa, donde murió, todo, entre la tarde y noche del domingo.

No se podía hasta ayer declarar la primera muerte por coronavirus en Tamaulipas, porque aún no estaban los resultados de la prueba para determinar si en efecto traía el coronavirus y no traía una prueba que se le hubiera hecho en el vecino país.

El primer diagnóstico fue de diabetes descompensada que desencadenó una insuficiencia respiratoria, lo que podría asociarse al coronavirus, pero no obligadamente.

La preocupación de la secretaria Molina es que algunos de los tantos enfermos texanos (iban hasta ayer 2 mil 877 casos en el vecino estado –con 38 muertes–, de los que 52 corresponden a las ciudades vecinas de Tamaulipas), están viniendo a atenderse en la frontera tamaulipeca.

Por eso la prioridad en las atenciones, pidiendo la cooperación y sinceridad de los pacientes, es, además de declarar todos los síntomas que se tienen, decir la procedencia, lugares de estadía y contacto previo.

Ésta y la próxima semana se consideran cruciales por las autoridades sanitarias y por ello la insistencia es a permanecer en el aislamiento social, quedarse en casa, para que no tenga espacios el virus, por dónde propagarse.

Si ya estás infectado y permaneces en casa, lo más seguro es que contagies a los que están contigo y transiten el ciclo del virus, en dos semanas, sin mayores complicaciones, porque el 85 por ciento de los enfermos no tienen síntomas o los tienen muy leves.

Entonces, cumplido el ciclo, no contagiarás a nadie más, si tienes el virus.

Solo en caso de fiebre y problemas respiratorios, la recomendación es acudir a las unidades hospitalarias a la valoración y eventual tratamiento.

Más vale acatar las disposiciones. Es por todos.