La prensa británica bautizó el alejamiento de los duques de Sussex, Harry y Meghan, como “Megxit”, y a pesar de adelantar posibles cambios en las normas que regulan la relación entre la corona y los medios, siguió abordándolos de la misma manera que contribuyó al distanciamiento.

Para The Times el alejamiento de Harry y Meghan generó un claro “rechazo” del Palacio de Buckingham, muestra decepción de la corona y afirma que ese movimiento de los duques se debe a la presión mediática e inestabilidad real.

Los duques de Sussex anunciaron la víspera su distanciamiento de la corona, la intención de lograr su autosuficiencia económica y refrendaron su apoyo a la reina Isabel II.

La respuesta este jueves de la prensa británica estuvo avivada por no consultar su decisión con ninguno de los miembros de la Casa Real, ni siquiera la monarca que afirmó comprender su decisión, pero advirtió que es un tema “complicado” que necesita “tiempo”, mediante un comunicado emitido tras el anuncio.

The Guardian por su parte estima que habrá modificaciones al ‘Royal Rota’, sistema que permite el acceso a los medios para garantizar la cobertura de prensa en eventos relacionados con la corona.

The Sun comenzó a denominar la situación como “Megxit”, por Meghan y la palabra “exit”, y se señaló que el hashtag respectivo fue tendencia este miércoles en las redes sociales.

Piers Morgan, periodista y presentador de televisión, escribe en The Daily Mail que la declaración de los duques parece parte de las “travesuras reales vergonzosas” y espera que les retire los títulos reales.

Actualmente, la subvención soberana cubre cinco por ciento de los gastos de los duques, por el mecanismo de financiamiento anual que cubre el costo de la monarquía.

Este dinero es al que pretenden renunciar, pues el porcentaje restante es cubierto por Carlos de Gales, hijo mayor de la reina y pimero en la línea de sucesión al trono británico.

La seguridad de los duques seguirá siendo pagada por el contribuyente británico al declararse “personas protegidas internacionalmente”, con asignaciónes de elementos armados por parte de la policía metropolitana, señaló Caroline Davies de The Guardian.