*Su disco Primer Canto del Cenzontle contiene una diversidad de estilos

Por Aura Fuentes

México, 09 de diciembre (Notimex).— El compositor michoacano Juan Vázquez presenta en su disco Primer Canto del Cenzontle una propuesta disruptiva de lo que se ha hecho durante un siglo, porque no responde a lo experimental de lo contemporáneo ni a lo tradicional académico.

“Eso, creo, ha sido uno de los principales obstáculos respecto a sacar este material de la mano de la parte académica o de los concursos oficiales que buscan música contemporánea, aunque esta también es contemporánea”, comparte en entrevista con Notimex.

Juan Vázquez (La Piedad, 1993) es abogado, y aunque estudió Derecho relata que la formación musical que tuvo fue por clases particulares, es autodidacta y siempre ha estado motivado por su pasión a la composición, que, considera, es a lo que vino al mundo: “Digamos que mi formación en ese sentido ha sido poco ortodoxa”, al igual que el género que maneja.

“Es música que no se escucha tanto ni es comercial; además, en el sector de la música académica —a la que pertenece— están todavía las posturas del siglo XX y de la música contemporánea que es mucho más experimental, sin armonía, sin retórica, sin melodía, por así decirlo, todavía está muy cerrado, como una suerte de estigmatización en contra de este tipo de música que reivindica la tradición”.

Por ello, para sacar este material discográfico, en el que Ismael Carrillo Suárez fungió como ingeniero de audio, le ha requerido una búsqueda por otros lados y mucha autogestión junto con su compañero pianista Miguel Ángel Rivera Bustamante, en manos de quien dejó sus partituras, las cuales se escucharon el 8 de diciembre en el estreno oficial en el Centro Cultural Los Pinos.

“Es un proceso difícil de describir, es muy íntimo, no suelo trabajar si alguien me está observando, es un proceso, digamos, de intimidad, a veces tardo dos meses sin escribir y en unos cuantos días logro concretarlo, a veces voy poco a poco trabajando sobre las notas» y, expone, «es muy diverso, depende mucho del material que se esté trabajando en este proceso de composición”.

A sus 26 años de edad, Juan Vázquez tiene compuestas 21 obras, no todas ellas para piano, aclara; sin embargo, las que se presentaron para este disco sí fueron de ese instrumento, pues además es pianista: “Son obras de toda mi vida, por así decirlo, hay obras de cinco o seis años y hay otras muy recientes, todo el repertorio que se compiló en un disco estará en una plataforma musical”.

Explica que el título de su proyecto se debe al “ave legendaria del cenzontle, pájaro de las 400 voces», porque considera que hay bastante diversidad, como también la tiene la diversidad del canto de cenzontle. «Es música clásica, como comúnmente se tiene la tradición, música de concierto. Se pueden encontrar muchos estilos en el material discográfico”.

También, porque en el “Nocturno I” —una de las piezas del repertorio— hay una cita a la música de su natal Michoacán, en donde existe un folclor, aunque revela que la parte mexicana de sus temas se encuentra más en la música que no es para piano, y en este caso su estilo se parece más el impresionismo y posimpresionismo.

 

Reto técnico e interpretativo

Miguel Rivera (Oaxaca, 1983) reconoce que la propuesta del disco es realmente una disyuntiva en algunos círculos académicos, porque rescata ese gusto por la tonalidad, la modalidad e, incluso, inventó un sistema armónico nuevo al cual le falta mucho por explorar.

“Hay cosas muy interesantes que se pueden lograr y eso es parte de lo que viene en el disco, todas las piezas tienen esa búsqueda, pero sí tienen esos pequeños toques que hacen su música diferente, sí escucho un sello personal”, resalta sobre el trabajo del compositor, el cual, admite, ha sido un reto técnico e interpretativo, pues su música no es sencilla.

Vázquez señala que el disco se estuvo grabando aproximadamente hace dos meses, tiempo en el que el maestro Rivera se abocó al estudio del repertorio, y tras tocarlo en otros foros y en conciertos más pequeños, estuvieron listos para la presentación del disco en Los Pinos, donde —destaca— fue un honor exponerlo y algo muy emocionante, porque nunca se imaginaron estar en ese lugar.

“Lo más complicado fue hacerlo todo de corrido, cada pieza tiene su tipo de dificultad, darle cohesión a toda la sonata como una pieza es muy difícil, requiere de mucha experiencia y haber conocido mucho repertorio; técnicamente tiene la “fantasía”, la tocata son piezas muy difíciles por el virtuosismo que requiere a nivel velocidad y fuerza”, confiesa el pianista.

Aunado a ello, el graduado de la Escuela Superior de Música describe a la suite debido a la sutileza armónica que se tiene que escuchar y debe estar presente; entre los temas de este disco también se encuentran: “Pequeña suite para una bailarina”, “Dos nocturnos para piano”, “Vals para María” y “Tocata para piano O.F.C.”.

Tras su presentación en el Salón Manuel Ávila Camacho, el repertorio se presentará en otros foros; también, se extenderá a otra plataforma digital ya que, Vázquez menciona que este formato es la manera de producción más cotidiana ahora: “también hay que empezar a desentendernos de la materia prima, ya tenemos el mundo lleno de basura, entonces es importante aprovechar esa parte”.