Un grupo talibán atacó hoy un puesto de control militar en el norte de Afganistán y abatió a 15 soldados, una indicación de que pese a las fuertes nevadas en el país las agresiones se mantendrán.

El gobernador de la región de Dolababad, cercana a la frontera con Uzbekistán, Muhammad Yusef, anunció que aproximadamente una docena de pistoleros acribillaron el puesto de control.

La víspera, los talibanes reconocieron haber atacado el vehículo de un soldado estadounidense en la provincia de Kunduz, en el norte del país. En contraste, el ejército estadounidense anunció que el carro “explotó” debido a unas armas que investigaba, reporta Al Jazeera.

Estos ataques son poco frecuentes durante la temporada invernal pues las fuertes nevadas en las montañas, donde los militantes generalmente descansan, les sirven para reagruparse antes de su ofensiva anual de primavera.

Ante un aumento en las pérdidas de las fuerzas de seguridad afganas en 2019, el gobierno se retiró de cientos de puntos de control en áreas aisladas que fueron un imán para los ataques talibanes

Se estima que dos mil 400 miembros de las fuerzas de seguridad y militares estadunidenses han muerto en combates desde 2001.

Estados Unidos comenzó la invasión militar a Afganistán tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 llevados a cabo por Al Qaeda contra el World Trade Center en Nueva York.

En busca de reforzar su presencia en el país centroasiático, Washington inició negociaciones desde 2018 con los talibanes. No obstante, Trump advirtió que solo ordenará la medida cuando los talibanes garanticen que su territorio no será usado de nuevo por Al Qaeda u otros grupos yihadistas.