Washington.- El gobierno del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó a la petrolera estadounidense Chevron detener la producción y exportación de crudo en Venezuela, tras un siglo de relación entre la empresa y el país sudamericano.

De acuerdo con la orden, Chevron debe cerrar su operación en Venezuela para el 1 de diciembre. La empresa era el último productor de petróleo estadounidense que quedaba en Venezuela.

En el pasado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos había concedido licencias a Chevron para continuar las actividades productivas en asociación con la empresa petrolera nacional, PDVSA, la cual había sido sancionada por Trump en febrero, informó CNN.

Sin embargo, el Departamento del Tesoro emitió la licencia para permitir a Chevron seguir tratando con la petrolera PDVSA solo para labores de mantenimiento esencial y reducción de sus operaciones en el país.

La orden de la administración de Trump forma parte de una serie de embates económicos hacia Venezuela, pues el gobierno de Estados Unidos ha presionado repetidamente a su mandatario, Nicolás Maduro, para que éste dimita.

Según el análisis de CNN, a pesar de que Venezuela tiene más reservas de petróleo que cualquier otra nación del mundo, su producción se encuentra en crisis debido a la complicada situación política y social del país sudamericano, así como por las duras sanciones de Estados Unidos.

Por su parte, el portavoz de Chevron, Ray Fohr, dijo en un comunicado que la compañía permanecerá comprometida con la seguridad y el bienestar de los empleados y sus familias, así como de los programas sociales y humanitarios de la compañía en Venezuela durante la emergencia sanitaria.

“Nuestro legado en Venezuela se remonta a la década de 1920 y desde entonces, nos enorgullece ser parte de las comunidades locales, contribuyendo a su desarrollo económico y social”, dijo Fohr.