Las autoridades australianas informaron a los turístas que disponen de 48 horas para abandonar las zonas turísticas de la costa sudeste de Australia, ante una nueva ola de calor que avivará la progresión de los incendios que asolan el país.

Los incendios se encuentran fuera de control y provocaron la muerte de al menos ocho personas en 48 horas y redujeron a cenizas cientos de hectáreas de matorrales en el primer día del año.

El Servicio de Bomberos de Nueva Gales del Sur pidió a los turistas que abandonen una zona costera de 200 kilómetros de largo desde la ciudad de Batemans Bay hacia el sur y el estado de Victoria, ya que se espera sea un día negro en el frente de incendios, con ráfagas de viento y temperaturas superiores a 40 grados centígrados.

Cientos de turistas pasaron dos noches aislados en la localidad costera de Mallacoota, Nueva Gales del Sur, para evitar ser alcanzadas por el fuego, destacó la cadena a ABC.

Las autoridades desplegaron desde la víspera barcos y aviones militares, además de personal de emergencia, para prestar asistencia humanitaria y evaluar los daños.

Al menos 18 personas han muerto y otras cinco se encuentran desaparecidas desde el comienzo de la temporada de incendios en septiembre, más de mil casas han sido destruidas y 5.5 millones de hectáreas han ardido.