Las fuerzas de seguridad libanesas lanzaron gas lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes antigubernamentales en el centro de la capital del país, Beirut, en unos enfrentamientos que se prolongaron la víspera, que dejaron decenas de heridos.
Los manifestantes se reunieron frente al edificio del Parlamento e intentaron ingresar por la fuerza, pero la policía antidisturbios impidió acercarse a la Plaza de los Mártires, donde se encuentran los acampados contrarios al régimen.
Las autoridades informan de al menos 20 heridos, pero medios locales reportan más de 50, ante la respuesta de la policía con gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes.
Incidentes similares han ocurrido en Beirut y otras ciudades de Líbano en las últimas semanas, lo que llevó al jefe del Hezbolá, a pedir tranquilidad a sus simpatizantes.
Entre los heridos hubo policías luego de que partidarios de Hezbolá y del Movimiento Amal se enfrentaron con manifestantes antigubernamentales, menos de 32 horas antes de una reunión parlamentaria clave para nominar a un nuevo líder libanés.
La Defensa Civil Libanesa dijo que trató a 54 personas por lesiones, llevando a más de la mitad al hospital.
La ola de protestas que generó la actual situación política comenzó el 17 de octubre ante alzas de impuestos, las cuales generaron descontento y la demanda de que hubiera un nuevo gobierno pero sin políticos en los cargos ministeriales.
El 29 de octubre el primer ministro encargado, Saad Hariri renunció y anunció su apoyo al contratista Samir Khatib para que forme gobierno y ocupe ese cargo.
Datos del Arab Barometer publicados el 26 de noviembre por el sitio informativo The New Arab, señalan que 85 por ciento de libaneses entrevistados se encuentra descontentos con la actuación del gobierno.
Además, 91 por ciento señala que existe una corrupción endémica que afecta a las instituciones, mientras 80 por ciento manifestó que no confía en el gobierno, el Parlamento o el sistema judicial.
Khatib, ingeniero y hombre de negocios y cercano a Hariri, ha desarrollado su vida profesional sobre todo en la ingeniería y el mundo de los negocios. A la fecha es vicepresidente de la empresa Khatib&Alami, compañía global dedicada a la ingeniería.
En esas empresas ayudó a su expansión en países árabes como Arabia Saudita, Argelia, Egipto, Libia y Siria, y a la fecha es el responsable de la operación de la empresa en Qatar.