Uagadugú.- Human Rights Watch (HRW) acusó este lunes a las fuerzas de seguridad de Burkina Faso de la presunta ejecución de 31 detenidos el pasado nueve de abril en la localidad de Djibo, en el norte del país.

La organización no gubernamental afirmó que los hechos ocurrieron tras el arresto de las víctimas en una operación antiterrorista, y demandaron “una investigación imparcial de los hechos y la rendición de cuentas de los responsables”.

De acuerdo con el informe de la ONG, se trata de un hecho relacionado al fuerte deterioro de la seguridad debido a la presencia de grupos islamistas, incluidas las filiales de Al Qaeda y Estado Islámico en el Sahel, en todo el país.

Esos grupos han reclutado principalmente a jóvenes de la etnia Peul y atacado tanto a las fuerzas de seguridad como a la población civil, principalmente en la zona fronteriza con Malí y Níger, informó la organización.

Agregó que desde 2017 ha documentado el asesinato de más de 300 civiles a manos de los grupos islamistas así como de cientos de hombres por parte de las fuerzas de seguridad por su presunto apoyo a los yihadistas, sin contar a más de 800 mil personas desplazadas por la violencia.

HRW aseguró que entrevistó a 17 personas al tanto de las recientes ejecuciones, quienes creen que los hechos estarían relacionados con la reciente presencia en torno a Djibo de islamistas armados.

“Los yihadistas han estado pululando por la zona, es como si nos hubieran castigado por su mera presencia”, comentó un testigo no identificado a la ONG.